Cambiar las ventanas de casa es una necesidad que aparece con el tiempo ya que las ventanas pueden perder sus funciones, como por ejemplo, la función de aislamiento del exterior, tanto para el calor, el frío, como para el ruido. Y es que cambiar las ventanas de casa aporta muchas ventajas, como ganar confort o sentir mayor comodidad en ella.

Los errores que debemos evitar al cambiar las ventanas de casa

1. No elegir el momento idóneo

Se puede aprovechar para hacer el cambio de ventana al hacer una reforma en el hogar, pero se debe tener en cuenta el momento en el que se haga el cambio. Si la reforma es entera, se puede organizar para realizar el cambio en el momento adecuado, pero si vas a aprovechar una reforma más pequeña, hay que saber cuál es el momento para que el resultado sea óptimo.

Por ejemplo, si vas a pintar las paredes o cambiar azulejos, el mejor momento para cambiar las ventanas es hacerlo antes de pintarlas. De esta forma se pueden evitar roturas de los nuevos azulejos o tener que volver a pintar o perfilar la pared. Por esta razón, lo más adecuado es primero colocar las nuevas ventanas y luego realizar la pequeña reforma.

2. Elegir la ventana por el precio

A la hora de elegir una ventana de calidad, hay que saber elegirla tanto por el material que está compuesta, las de PVC pueden ser muy buena opción, como por la calidad del vidrio, ya que gracias al vidrio se puede conseguir también más aislamiento térmico y acústico, así como una mayor durabilidad de la ventana.

3. No elegir el modelo adecuado al cambiar las ventanas de casa

Existen muchos modelos y sistemas de ventanas, por ello cambiar las ventanas también conlleva elegir las más adecuadas para nuestro hogar.

No es lo mismo una ventana de aluminio o una ventana PVC, así como ventanas correderas u oscilobatientes. Según el entorno es mejor elegir un tipo de ventana u otra.

Existen también otros modelos de ventanas menos conocidas pero muy útiles, como las pivotantes. Este tipo de ventanas son perfectas para habitaciones pequeñas con una gran necesidad de ventilación.

4. No cambiar el cajón de la persiana

Es muy común que la ventana también tenga una persiana y es muy importante que el cajón de la persiana se complemente con la misma calidad de la ventana. Por el contrario, puede haber deficiencias en las funciones de las ventanas como pérdidas de temperatura o poco aislamiento. Incluso, ya con la ventana nueva colocada, al poco tiempo después tengas que cambiar la persiana porque se averíe.

Se suele evitar el cambio de cajón para reducir costes, pero no es buena opción, ya que el cajón de persiana no supone una gran inversión dentro del coste de la ventana.

5. Solicitar a otros que instalen la ventana comprada

Es recomendable que la empresa que te provee la ventana sea quien realice la instalación. Es una forma de ahorrar costes y ahorrar tiempo en buscar un albañil que la instale. Además, aporta mayor tranquilidad que la instalación es la correcta para el modelo de ventana que se ha comprado.

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